REAL Y MUY ILUSTRE ARCHICOFRADÍA DE NUESTRO SEÑOR JESUCRISTO RESUCITADO.
El Domingo de Resurrección desfila por las calles de Murcia la última procesión de su Semana Santa, la del Resucitado.
Se sabe por actas capitulares del siglo XVI, que el Alcalde y ediles habían asistido a la procesión que partía de la iglesia conventual de la Trinidad, en que además de los motivos religiosos, alegres y coloristas, propios de la celebración gozosa y jubilar de la Resurrección, salían bailarines y mojigangas.
Su fundación como cofradía se fija en el año 1700. Era una cabalgata con comparsas, negros, soldados, danzarines y músicos, con cohetes y disparos de arcabucería, pero el 17 de abril de 1710, un disparo o un cohete, ocasionó la muerte de una anciana, por lo que el Obispo Belluga decidió prohibirla en lo sucesivo. No conocemos la fecha de su reanudación, pero unas constituciones son aprobadas en el año 1802.
En 1902, un grupo de entusiastas nazarenos quiso fundar la cofradía, pero el intento no cuajó, aunque llegaron a elaborarse unos estatutos. Es ya en 1910 cuando comienza a salir la procesión desde la iglesia de la Merced, en donde permanece hasta el año 1932, en que vuelve a quedarse en el templo por la llegada de la II República.
Nuevamente, el día de la Ascensión del Señor, del año 1947, un artículo del canónico D. José María Aguilar Andreu convoca a antiguos mayordomos y otros murcianos, de cuya reunión saldría otra vez la cofradía y procesión del Resucitado, que con sede en la iglesia de Santa Eulalia (antigua Santa Olalla de los catalanes) y dirigidos por el párroco D. Francisco Martínez Girada, desfilaría por las calles de Murcia el 28 de marzo de 1948.
En esta procesión, llamada curiosamente “la del demonio” figura éste encadenado y escoltado por varios ángeles niños. En los primeros años de su tercera época, fue el famoso recitador panocho murciano “Emilio el de los muebles” quien personificó tal representación; a éste le sucedió Manolo López Alcaraz, el famoso camarero del bar “La Tapa” y actualmente desfila el sobrino de éste.
Los cofrades visten túnica de raso y turbante hebreo con una de las tiras del mismo color de la capa, según la Hermandad a la que pertenezcan.
1.- San Miguel Arcángel, de Francisco Liza, año 1994. El arcángel, con la espada en la mano, pisa al demonio tras vencerle.
2.- Cruz Triunfante, portada por bellísimo ángel, de Clemente Cantos, que sustituyó a la que hasta 1917 salía y de la que era autor Anastasio Martínez.
3.- Nuestro Señor Jesucristo Resucitado, titular de la cofradía, obra de José Planes Peñalver, año 1949, con soldado romano de Antonio García Mengual del año 1972. Cristo sale triunfante del sepulcro.
4.- Las tres Marías y el Ángel del Señor, del escultor Antonio Labaña Serrano, año 1993. Representa el momento de la visita de las piadosas mujeres a la tumba de Jesús para ungirlo de aceites.
5.- Aparición de Jesús a María Magdalena, de Antonio Labaña Serrano, año 1982. Son imágenes de vestir.
6.- Discípulos de Emaús, de Antonio Labaña, año 1983. Representa a Jesús en Emaús, sentado a la mesa con dos discípulos y bendiciendo el pan.
7.- Aparición de Jesús a Tomás el Mellizo. Los apóstoles son de Sánchez Araciel, año 1912 y el Cristo es de Hernández Navarro, de 1994. Es el momento en el que Jesús muestra sus heridas a Tomás.
8.- Aparición de Jesús en el lago Tiberiades, de Antonio Labaña, año 1987. Compuesto por Jesús, San Pedro, Santiago el Mayor y San Juan. La barca es de verdad y fue un regalo de la Cofradía de Pescadores de San Pedro del Pinatar.
9.- Ascensión del Señor, de Hernández Navarro, año 2000. Es el paso más grande de la Semana Santa.
10.- San Juan Evangelista, de Venancio Marco, año 1911. Aparece escribiendo el Evangelio con una pluma, y junto a él se encuentra el águila.
11.- Virgen Gloriosa, de José Sánchez Lozano, año 1950. Bella imagen de vestir.
Texto y fotografías enviadas por Estrella